Para este rompe hielo necesitarás un poquito más de preparación y una cámara de fotos. Toma fotografías de diferentes partes del cuerpo de tus jóvenes, de la nariz, de una oreja, del pelo, una mano, un par de zapatillas, un brazo con un reloj, una rodilla, etc.) No dejes que te vean cuando tomas la foto sino perderá el factor sorpresa) Cuando tengas varias de estas fotos, puedes usarlas para captar la atención de tus jóvenes al comienzo de la reunión. Saca las fotos de a una y entre todos deben adivinar de quién se trata. Si quieres puedes dividirlos en equipos y al final el equipo que más fotos adivinan de quién se trata, es el equipo ganador.
Algunos consejos:
– Que todos puedan ver la foto; puedes hacer ampliaciones, o hacer duplicados de las fotos para darle una a cada grupo; o si consigues una cámara digital, las puedes mostrar desde una computadora. Pero es importante que todos puedan participar.
– Ten en cuenta sacarle la foto tanto a los populares como a los más tímidos, lo importante es que todos se sientan parte.
¿A dónde llevarlo desde aquí?
Con este rompe hielo puedes hablar de la importancia de conocernos, de hacernos amigos, de ser unidos y de integrar a todos los que llegan al grupo. La Iglesia es el lugar donde todos pueden llegar así como son y sentir el abrazo de Cristo a través nuestro, un lugar para ser parte sin importar nuestras diferencias. La Iglesia no rechaza a los que son menos populares sino que los atrae y los hace sentir bien. La Iglesia es yo, tú, Él… nosotros. Un cuerpo formado de distintos miembros con funciones diferentes.
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