Ladrón de Regalos
septiembre 22, 2016Citas y no a ciegas
septiembre 22, 2016¿Crees que tus jóvenes se dan cuenta de todo lo que se pierden por limitarse a relacionarse solo con un grupo reducido de personas?
Divide a los jóvenes en grupos pequeños de 5 a 10 personas. Luego toma una soga por grupo y ata a los miembros de cada equipo mirando hacia afuera (asegúrate que estén bien atados.) Entonces cada jugador de cada grupo debe introducirse con otros 10 jugadores (no pueden ser los de su propio grupo)
¿A dónde llevarlo desde aquí?
Luego de haber pasado por la experiencia de cortar las sogas, habla con tus jóvenes del por qué fue tan difícil lograr conocer o saludar a los otros 10 jugadores, atados al grupo y cómo se relaciona con las elites.
También conversa de cómo se sienten aquellos que no son parte, aquellos que quieren ser parte pero nunca los integran y charla de cómo esta actitud también perjudica a la obra del Señor en sus vidas y al servicio de la Iglesia en la comunidad.