–Puedes dejar el pago sobre la mesa –dijo ella mientras recogía su ropa y comenzaba a cubrir su torso desnudo.
–¿Puedo volver mañana a la misma hora?
–Prefiero que no.
–¿Pero acaso no es tu trabajo recibirme?...
En nuestros círculos actuales, el gozo y el sufrimiento parecen ser opuestos o antónimos, pero para Pedro el sufrimiento no debía sonar extraño para sus lectores...
Espero que no estés pensando que este título se refiere a llevar una guitarra a las clases de la escuela bíblica dominical. De ser así, te estás alejando de la realidad. Quizás hayas escuchado...
El dilema que tarde o temprano todos los líderes cristianos de hoy en día enfrentamos es: ¿Cómo mantenernos humildes cuando nuestras carreras, nuestro trabajo, y el aporte que queremos hacerle al mundo demandan que promocionemos lo que hacemos?